Hacia ABU DHABI

Tomamos un taxi desde el hotel hasta la terminal 1 del aeropuerto internacional de Dubai, la misma terminal donde llegamos desde Frankfurt y desde donde partiremos al final de nuestro viaje. Tardamos poco, ya que está cerca y no hay demasiado tráfico. Vamos a recoger el coche de alquiler que tenemos reservado. En el mostrador de Rental Car Group, hacemos el pago y el papeleo. Recogemos el GPS que habíamos reservado y un empleado de la agencia nos lleva en coche hasta un parking más alejado donde nos espera el nuestro. A pesar de que el que había pedido era de cambio manual el que nos asisgnan es automático. Preguntamos si no tienen uno manual para alquilarnos y nos dicen que no, que todos son así. Nos dice que es muy fácil y rápidamente nos da unas cuantas instrucciones. No parece complicado.
Siguiendo las instrucciones del GPS pronto nos ponemos en camino hacia Abu Dhabi. Pasamos cerca del omnipresente Khalifa.


Siguen haciendo obras y a menudo tenemos que tomar desvíos que nos alejan de la ruta indicada pero sin demasiados problemas vamos retomando la dirección correcta. Tras varios minutos, dejamos Dubai atrás. Estamos en una autopista de cinco carriles con mucho tráfico que continúa sin interrupción por medio del desierto hasta Abu Dhabi a lo largo de unos 130 kms, los que nos separan de la capital de Emiratos.
Por el camino no da la sensación de agobio. Las palmeras y los setos a ambos lados de la autopista nos hacen olvidar dónde estamos.


Entre unas cosas y otras, hemos salido de Dubai más tarde de lo previsto y, si es cierto que las visitas de los no musulmanes a la Gran Mezquita Sheikh Zayed terminan a las 12:00, no vamos a llegar a tiempo para visitarla por dentro. Es una faena, porque he leido que realmente merece la pena.

==> Gran Mezquita Sheikh Zayed


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